Después de que haya pasado algo te das cuenta de que no todo puede ser malo.
Después de dar todo por perdido, de repente se abre una luz, y allí, allí es donde los encuentras, en ese rincón donde sabes que nada se borra, nada se olvida, y aunque algo haya ocurrido, algo malo o algo bueno allí los tienes. Por suerte algunos días resultan ser mejor que otros, pero siempre te aportarán ese granito de arena que hace que tu boca tenga forma de sonrisa, tu ojos brillen como los diamantes, tus oídos escuchen las palabras mas bonitas, tus manos sientan el roce de los mejores momentos y tus olfato huela que eso no tiene fin.
Porque ahora cuando echo la vista atrás me fijo en los pequeños detalles que ahora son inmensos. Ahora sé que si me enfado lo primero que voy a hacer es desenfadarme y si me tiráis una piedra al corazón tal vez haya sido por mi propio bien.
No sabríamos todo lo que aprendimos, a base de hostias y andadas..(8)
